Hay diversas maneras de ahorrar en el seguro de tu auto sin perder coberturas, a veces estas medidas no llegan a ser suficientes para quienes buscan un precio más bajo y se arriesgan a renunciar a garantías que aunque les permite ahorrar en la prima, pueden acabar saliendo muy caras en caso de un accidente.
Primero tienes que tener claro qué tipo de seguro de auto quieres contratar. A continuación te damos una guía que te ayudará a elegir qué coberturas voluntarias puedes quitar para reducir la prima anual.
- Vehículo de sustitución o cortesía. Hazte esta pregunta: En caso de que tengas que llevar tu vehículo al taller por una avería o un accidente y la reparación pueda demorarse varios días, ¿podrías realizar tus traslados habituales en otro medio de transporte sin un grave contratiempo?
Si tu respuesta a esta pregunta es sí, entonces puedes pedir a la compañía de seguros que no incluya la cobertura de vehículo de sustitución en la póliza y revisa el precio del seguro. - Asistencia en la carretera. En el caso de que tengas un vehículo que apenas uses y de hacerlo, los trayectos son siempre cercanos a ti, puedes arriesgarte a quitar la cobertura para que el precio sea más económico. Eso sí, ten en cuenta que en caso de avería o accidente no tendrás derecho al remolque del vehículo.
No es recomendable quitar esta cobertura si alguna vez haces viajes lejos de tu domicilio, puesto que en caso de inmovilización nadie acudirá al rescate de tu auto ni te pagarán para que tú como los ocupantes continúen el trayecto. - Talleres con convenio. Algunas compañías te ofrecen la posibilidad de reducir el precio de la prima del seguro a cambio de que, en cada reparación tras siniestro o remolque por avería, tengas que acudir necesariamente a un taller con el que tienen convenio. Esto permite a la compañía ahorrar en costos de reparación y mano de obra y por consiguiente, ofrecer mejores precios en sus seguros.
Sin embargo, esta reducción de precio a veces puede traducirse en reparaciones de peor calidad en las que casi nunca tendrás a un mecánico de confianza que defienda tus intereses. - Divide el pago de la póliza. En el caso de que sigas estas pautas y no consigas reducir la prima como te gustaría, puedes pedir a tu seguro de autos que te dividan el pago en varias cuotas, de tal forma que no tengas que hacer frente al costo total del seguro de una vez, no reduce la prima pero sí te facilita el pago del seguro.
- Recupera las coberturas eliminadas. Aún cuando hayas decidido prescindir de alguna de las coberturas citadas, en el caso de que más adelante te arrepientas de la decisión, siempre puedes volver a contactar con tu compañía y solicitarles su incorporación. Para esto, no es necesario esperar al vencimiento de la póliza, aunque lógicamente deberás pagar un dinero extra en el caso de que la compañía acepte la modificación.
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