Cuando vas a comprar un carro nuevo, puedes optar por financiarlo mediante un préstamo, en lugar de pagarlo en efectivo. Un préstamo de automóvil también se conoce como gravamen. Es un acuerdo entre tú y el prestamista que establece que realizarás pagos mensuales de un monto predeterminado hasta que pagues la totalidad del préstamo.

El prestamista, también llamado acreedor prendario, técnicamente es dueño del vehículo mientras tu realizas los pagos. Solo cuando pagas el préstamo en su totalidad, te conviertes en el propietario legal del carro y el gravamen se elimina del título.

Sin embargo, hay algunas situaciones en las que es posible que desees vender tu auto antes de que se pague el gravamen en su totalidad. Tal vez el costo de tener un auto se está volviendo demasiado caro.

No es ilegal vender un auto con un gravamen, y no hay sanciones por hacerlo, siempre que se maneje correctamente. Hay un requisito importante; debes pagar el préstamo en su totalidad y eliminar el gravamen del título antes de poder venderlo legalmente a otro comprador.

Vender un auto de tu propiedad es mucho más fácil que vender un auto con un gravamen. Sin embargo, es completamente posible si estás preparado para cubrir los costos asociados.

Aquí te dejamos los pasos que debes seguir para vender un carro con un gravamen.

Determina el monto de su pago

Sí tienes un saldo de préstamo, deberás pagarlo antes de que se pueda eliminar el gravamen del título. Sin embargo, la cantidad que tienes que pagar no es solo el saldo pendiente en tu estado de cuenta.

Debido a los intereses a lo largo del tiempo, el monto de pago incluye el monto total adeudado al prestamista. Su compañía de préstamos puede darle una cotización para el saldo de liquidación.

Empieza a vender

El siguiente paso es comenzar el proceso de venta de su vehículo. Esto puede incluir llevar el auto al servicio, verificar que todos los sistemas funcionen sin problemas y realizar las reparaciones necesarias. Por lo general, vale la pena invertir tiempo y dinero para reparar, lavar y detallar el automóvil antes de mostrárselo a los compradores potenciales.

Valor de tu automóvil

Con una guía de precios, como Kelley Blue Book o NADA Guides, encuentra el valor actual de una venta privada de tu vehículo. Por lo general, obtendrás más por tu automóvil en una venta privada que cuando haces el intercambio en un concesionario. La búsqueda en línea te servirá como un buen punto de referencia.

Vender a través de un concesionario de autos

Si planeas cambiar el vehículo por algo diferente, la mejor opción es vender el automóvil a través de un concesionario. Así es como funciona: cuando compras un vehículo nuevo del concesionario, usarán las ganancias del intercambio para pagar tu préstamo, o agregarán el monto de la liquidación al préstamo para el automóvil nuevo. El concesionario trabajará con tu prestamista para transferir el título del nombre del acreedor prendario al concesionario de automóviles.

El concesionario hará todos los cálculos por ti y organizará la transferencia del título con tu compañía de préstamos.

Vender tu auto con un gravamen de forma privada

La otra opción es vender tu automóvil a un comprador privado. En este caso, el proceso de venta es el mismo que para cualquier otro carro. Encuentra al comprador, le muestras el vehículo y acuerda un precio. Pero antes de poder darles el título, debes pagar el préstamo y resolver los detalles de venta.

Ordenar los detalles de venta

Si estás vendiendo tu automóvil a un comprador externo, no puedes transferir legalmente el título sin pagar primero el préstamo. La forma más rápida y fácil de hacerlo es visitar la oficina de tu prestamista con el comprador para pagar el préstamo, eliminar el gravamen y transferir el título al comprador. Por lo general, puede completar la transacción y transferir el título en una sola cita.

La otra opción es que el comprador pague el préstamo. La mayoría de los acreedores aceptan un cheque del comprador por el monto de la liquidación a cambio del título del vehículo. No obstante, debes visitar  la oficina del prestamista con el comprador y completar el proceso de liquidación.

Considera un depósito en garantía

Si tú o el comprador no viven cerca de la oficina de préstamos y no pueden completar el proceso de transferencia en persona, considera una cuenta de depósito en garantía. Con una cuenta de depósito en garantía, ambas partes tienen la seguridad de que el pago se completará debidamente una vez que se haya cancelado el gravamen.

Un depósito en garantía se usa a menudo cuando hay acuerdos contractuales que deben cumplirse hasta que se pueda cerrar la venta.

El uso de una cuenta de depósito en garantía conlleva una tarifa, que es una tarifa fija o se basa en el precio de venta total. Sin embargo, dado que la cuenta brinda seguridad financiera tanto para el comprador como para el vendedor, la tarifa generalmente se divide en partes iguales entre ambas partes.

En conclusión, si deseas vender tu automóvil a un particular o entregarlo a un concesionario para obtener uno nuevo, necesitarás saber cuánto debes aún en tu préstamo, es decir, si es más o menos de lo que podrás obtener vendiendo el automóvil y cómo tu prestamista te exige que manejes la transacción.

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